¿Cómo hacer que la
calidad vaya más allá de normas y protocolos para convertirse en una meta?
Hilo abierto. ¿particiPAS?
Sólo un sistema de calidad en el que todos los agentes estén
implicados, cada uno en la medida que le corresponda, podrá impulsar la
prestación del Servicio Público que la sociedad actual demanda.
Es a través de la calidad como hemos de conseguirlo y para
ello hemos de llegar hasta el final, que no es otra cosa que nuestro trabajo
diario se aproxime a ese ideal de
servicio que queremos dar, y por supuesto, que nuestros usuarios perciban esta mejora y la valoren de forma
positiva.
La calidad no se puede entender si no es compartida por
todos los miembros de la organización, desde la alta dirección, todos los
profesionales y, finalmente, el usuario. Un sistema de calidad eficiente no
puede imponerse, sino creerse; y para ello es fundamental la implicación y
motivación de los profesionales. El Equipo de Gobierno ha de dirigir, liderar y
coordinar un Plan de Calidad que abarque todos los ámbitos, y por supuesto,
deberá de formar y motivar al personal en este desempeño, de forma que esta
labor no se vea como una carga más, sino como una nueva forma de trabajar que
se ha de traducir en hacer mejor nuestro trabajo y en mejorar los objetivos
propuestos, con la consiguiente satisfacción profesional y personal de todos
los implicados.
Estamos cansados de ser moneda de cambio con la que negocian
nuestros dirigentes y políticos, de que se ponga en entredicho nuestra
profesionalidad y “buen hacer”, de que, pese a los esfuerzos que hacemos día a
día por prestar un buen servicio, sigamos estando en el “punto de mira” de la
sociedad. Un sistema de calidad nos permitirá poner aún más en valor el trabajo
que hacemos, demostrando sin lugar a dudas nuestra profesionalidad ante
nuestros dirigentes y ante la sociedad.
Instrumentos como la gestión por proyectos, necesario en
tantas cuestiones que son transversales a los servicios, la flexibilización de
la plantilla para poder paliar los procesos puntuales que necesitan refuerzo,
han de ser tenidos en cuenta para poder mejorar. Ahora bien, consideramos que esa mayor adaptabilidad debe estar ligada al sistema retributivo. Cambios
sí, pero, esta vez, NO a costa del trabajador.
Además, el sistema de calidad del PAS debería estar alineado
con otro, igual de importante o más: el del personal docente, a fin de que el usuario, principalmente, los
estudiantes de la Universidad, perciban un verdadero servicio público de
calidad en todas sus vertientes.
Éstas son unas primeras ideas elaboradas por un grupo de compañeros que, como muchos de vosotros, creemos en la necesidad de un cambio profundo de nuestra institución. Pero seguro que pueden ser mejoradas, enriquecidas o superadas con tu ayuda.
Apúntate con nosotros a crear hoy la Universidad de nuestro futuro.
Porque AHORA, tú cuentas.
"Una Administración que no tiene un sistema de carrera no puede hablar propiamente de funcionarios. Los hombres y mujeres que la ocupan son unos asalariados, que no ven delante de ellos ninguna perspectiva, ninguna garantía, y por encima de ellos ningún motivo, ningún elemento de subordinación" (Talleyrand Siglo XVIII)
ResponderEliminarLa carrera debe ser a la vez un derecho del funcionario y un instrumento para la Administración. Como derecho del funcionario refleja sus expectativas profesionales. Como instrumento de la organización, debe contribuir a que los funcionarios, seleccionados de acuerdo con los principios de igualdad, mérito y capacidad, permanezcan en la Administración, evitando la descapitalización de los efectivos, y puedan rendir al máximo desarrollando todas sus aptitudes y potencialidades de manera que se puedan prestar los servicios al ciudadano de una manera eficiente y eficaz.
Como nos apunta el punto 5 de la norma ISO 9001;2008, esto debe de ser el compromiso de la Gerencia, como responsable de la Gestión del PAS (Transmisible desde el Equipo de Gobierno). Sin el compromiso de la Dirección y su impulso, la Calidad, solo sirve para poner el Sello de AENOR en los impresos. La propia norma nos habla de los recursos humanos y la satisfacción del cliente, en este caso el estudiante.
Todo está inventado, solo hay que ponerlo a funcionar, con el compromiso necesario por parte del equipo de Gobierno, puede ser el motor del cambio de la atención al Estudiante por parte del PAS y PDI, aunque se deberá pagar el precio de la carrera profesional del PAS y PDI.
Y hablar de la calidad docente del PDI, que debería entrar en el Sistema con los suficientes criterios de objetividad que debería tener un Sistema de Calidad Integral y abandonarse los criterios subjetivos que tanto han primado hasta ahora.
Creo que un Sistema Integral de Calidad PAS-PDI, redundaría en la manera de hacer la UAL una Universidad puntera,donde nuestros alumnos y egresados sean reconocidos tanto a Nivel Nacional como Internacional.
Incluso el mayor viaje comienza con el primer paso.
El artículo de ayer en el periódico digital elmundo.com no tiene desperdicio. Aconsejo leerlo ya que habla sobre la calidad en las Universidades Públicas http://www.elmundo.es/espana/2014/12/10/5487710eca4741c5408b4586.html
ResponderEliminarEn concreto, me llamó la atención por describir la situación de un modo crudo la siguiente aseveración de Fernández-Villaverde, catedrático de Economía de la Universidad de Pensilvania: "al personal administrativo no le puede importar menos la calidad académica de la Universidad, los profesores quieren vivir tranquilos y los estudiantes sólo buscan disfrutar".
Creo que por desgracia describe bien la situación en un 90%, dejemos el 10% restante en la duda.
La "calidad" que nos han vendido hasta ahora todos sabemos que es un mero paripé, consiste en cubrir el expediente y mas burocracia y no mejora absolutamente nada, al contrario, crea mas descontento. Es hora de cambiar, pero... ¿ queremos hacer el esfuerzo de cambiar ?
La afirmación del catedrático de Pensilvania, refleja la realidad actual en la Universidad desde una visión bastante pesimista. Hay personal administrativo al que no le cabe la menor duda de que, si bien el camino que se está recorriendo no es el adecuado, la gestión correcta de un sistema de calidad, es la única salida para que la administración y el servicio público, salgan, por fin, del estado de letargo en el que se encuentran; de la misma manera no todo el profesorado está por vivir tranquilo y afortunadamente, y muy a pesar del sistema que impera, todavía quedan estudiantes con ganas de aprender y formarse.
EliminarYo prefiero una visión más optimista de la realidad: El camino actual es equivocado, pero todavía podemos retroceder y comenzar el adecuado.
El cambio en la UAL está por llegar. No pasará mucho tiempo para que "se renueve el aire", entre aire fresco y veamos, de nuevo, la luz; porque vendrán personas a liderarnos que abrirán las ventanas y encenderán la luz, tanto tiempo apagada, personas que creerán en un verdadero SERVICIO PÚBLICO y eso sólo pasa por una verdadera gestión de calidad, tanto en los servicios administrativos como en las aulas.